La Conferencia Episcopal Peruana (CEP) expresó su profundo agradecimiento al Papa León XIV por el afecto y la cercanía demostrados hacia Perú. Esto ocurrió durante una audiencia especial que el Santo Padre les concedió tras la misa de entronización celebrada el 18 de mayo de este año.
Durante el encuentro, el Papa se dirigió a la delegación peruana con un tono afable. Recordó con especial aprecio su servicio episcopal en la diócesis de Chiclayo, donde ejerció su ministerio pastoral durante varios años.
La delegación de la CEP estuvo conformada por Monseñor Jorge Izaguirre Rafael, obispo de Chosica y primer vicepresidente; Monseñor Luis Alberto Barrera Pacheco, obispo del Callao y segundo vicepresidente; y el Reverendo Guillermo Inca Pereda, secretario general adjunto. También participaron Monseñor Salvador Piñeiro García-Calderón, arzobispo de Ayacucho; Monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, arzobispo emérito de Trujillo; Monseñor Pascual Rivera Montoya, obispo prelado de Huamachuco; y Monseñor Giorgio Barbetta Manzocchi, administrador apostólico de la diócesis de Huari.
En la santa misa de inicio del pontificado, durante el rito de obediencia al nuevo sucesor de Pedro, Monseñor Luis Barrera Pacheco y el Padre Guillermo Inca participaron destacadamente en representación del episcopado peruano.
“El Papa conoce la realidad de Perú, no tenemos que explicársela porque lleva al país en el corazón. Él mismo nos decía que es el primer asombrado de cómo Dios lo ha llevado por caminos inesperados y cómo aún se siente impresionado por la obra de Dios en su vida. Le agradecemos su cariño y cercanía con nuestro país”, comentó Monseñor Jorge Izaguirre, primer vicepresidente de la Conferencia Episcopal Peruana.
Finalmente, la CEP invita a todo el pueblo de Dios a unirse en oración por el pontificado del Papa León XIV, para que el Espíritu Santo lo guíe y fortalezca en su misión al frente de la Iglesia.
