- En evento realizado en el CAEN se recordó que este delito no existió ni existe en el Código Penal peruano.
El auditorio del Centro de Altos Estudios Nacionales (CAEN) fue escenario de un nuevo Foro Panel Delitos de Lesa Humanidad: ¿Justicia internacional o herramienta de persecución política? a cargo de la Oficina Legal y Constitucional del Congreso de la República donde se abordó este tema fundamental y de gran actualidad.
El evento fue inaugurado por el Dr. Ángel Delgado Silva, jefe de la Oficina Legal y Constitucional del Congreso de la República, quien indicó que se trata de la defensa de la Ley 32107 dictada el año pasado con lo que se ha querido establecer un principio fundamental.
Delgado Silva cuestionó que a la fecha existan aproximadamente 1000 personas, entre policías y miembros de nuestras Fuerzas Armadas, que están siendo procesadas por delitos de lesa humanidad.
“Como país soberano no podemos permitir que este estado de cosas continúe. Estamos para hacer una argumentación jurídica porque consideramos que es una aberración porque se desconocen nuestros derechos y se destruye la lógica jurídica, se pervierte el derecho, se malquista a la justicia”, expresó durante su exposición.
Agregó que se está procesando a gente por delitos que no le corresponden y se deben poner las cosas en orden para combatir la injusticia de nuestros soldados y policías llamados a defender la democracia contra las bandas terroristas.
A su turno el abogado William Oblitas, recordó que en nuestro Código Penal no existe el delito de lesa humanidad.
Oblitas opinó entonces que no tiene sentido abrir un proceso por lesa humanidad sino se puede condenar a una persona por este delito, lo cual constituye una aberración.
El Foro Panel también contó con la participación del General de División del Ejército Jorge Carcovich y del Dr. Martín Kuan Garay, Director del CAEN quien deseo todo el éxito en la defensa de la Ley 32107.
Kuan Garay, sostuvo que estos debates nos llevan a la reflexión responsable de los delitos de lesa humanidad y del principio de legalidad que no deben quedar solo en un ejercicio teórico, sino que fomenten la armonía colectiva y el sentido de la justicia en sociedades marcadas por hechos complejos y dolorosos.
Anotó que debemos promover más espacios donde la academia y la experiencia se complementen con el conocimiento y el diálogo, para que no queden solo en ideas, sino que sean la génesis de nuevas interrogantes.