Este avance responde a la Política Nacional de Lenguas Originarias, que busca fortalecer la inclusión.
Un total de 3,000 servidores públicos en todo el país ya están certificados para brindar atención en lenguas originarias. Esta iniciativa tiene como objetivo garantizar un servicio público respetuoso y adecuado para toda la ciudadanía.
En un reciente evento en Ayacucho, 200 funcionarios de diversas instituciones recibieron sus certificados tras completar con éxito un proceso de capacitación en quechua. Este esfuerzo busca asegurar los derechos lingüísticos de cerca del 62.6% de la población de la región, que habla una lengua originaria.
Los servidores certificados provienen de entidades como el Programa Juntos, el Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (FONCODES), el Ministerio Público y la Dirección Regional de Salud de Ayacucho, entre otras.
Un compromiso con la diversidad cultural
El viceministro de Interculturalidad, Percy Barranzuela, destacó la importancia de este avance, asegurando que “ningún peruano debe dejar de recibir servicios públicos por barreras lingüísticas”. Afirmó que seguirán reforzando estas acciones para escuchar y entender a la población culturalmente diversa.
Como parte de este compromiso, se ha anunciado que en el segundo semestre del año se llevará a cabo una nueva campaña de certificación para servidores públicos bilingües (quechua-castellano) en la región de Apurímac.
En la región de Ayacucho, las lenguas predominantes son el quechua y el ashaninka, con una población hablante de casi 400,000 personas.