Debido a que representaban un grave riesgo para la integridad física de los usuarios del transporte público, la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) destruyó 236 vehículos que fueron retirados de las pistas.
Este resultado corresponde a tres procesos de chatarreo realizados entre enero y julio de este año. Los vehículos destruidos, entre los que se encontraban combis, cústers, minibuses, vans y autos, superaban los 35 años de antigüedad y muchos de ellos se encontraban internados en los depósitos de la ATU desde el año 2019. En total, estas unidades acumulaban multas por más de 24 millones de soles.
Uno de los casos más representativos fue el de la cúster conocida como “La bestia de Petit Thouars”, de placa B1B-741, con 41 años de antigüedad. Este vehículo prestaba servicio de manera informal, circulaba sin Seguro Obligatorio contra Accidentes de Tránsito (SOAT), sin Certificado de Inspección Técnica Vehicular (CITV) y en condiciones deplorables. Solo esta unidad acumulaba multas por un total de tres millones de soles.
También fueron destruidos otros vehículos que presentaban un alto nivel de informalidad y riesgo para los pasajeros, como la cúster de placa F0K-830, que tenía una deuda superior al millón de soles y registraba 24 actas de fiscalización; la cúster A3W-749, con 18 papeletas de tránsito, 16 actas de fiscalización y una deuda de 338 mil soles; y la combi A2T-743, que debía 117 mil soles por infracciones acumuladas.
De acuerdo con la ATU, estas unidades no solo operaban fuera del marco legal, sino que también representaban un peligro constante para la ciudadanía, ya que circulaban sin mantenimiento técnico, sin cobertura de seguros, y sin cumplir con las condiciones mínimas de seguridad exigidas por la normativa vigente.