La Defensoría del Pueblo anunció hoy el inicio de un diálogo crucial entre los mineros en proceso de formalización y el Poder Ejecutivo. Este encuentro se basará en los temas ya acordados en reuniones previas, buscando soluciones a la actual situación.
En un comunicado, la institución lamentó profundamente la pérdida de vidas humanas y los heridos resultantes de las recientes protestas sociales y bloqueos de carreteras en el interior del país.
«Saludamos la gestión de los dirigentes gremiales que, luego de sostener la reunión con la Defensoría del Pueblo en su sede central el miércoles 09 de julio, realizaron la consulta a sus respectivas bases a nivel nacional, a fin de reabrir las vías bloqueadas y así dar inicio al proceso de diálogo con el Poder Ejecutivo», señala el comunicado.
Asimismo, la Defensoría saludó la predisposición del Poder Ejecutivo para iniciar este proceso de diálogo, que se espera permita superar los impasses técnico-legales y así formalizar a miles de ciudadanos dedicados a la pequeña minería y minería artesanal.
La institución también condenó todos los actos de violencia y el uso desproporcionado de la fuerza pública, los cuales, a su juicio, solo exacerban la convulsión social.
«Apostamos por la formalización real, sostenible y permanente de la actividad minera, en el marco del respeto a la ley y los derechos fundamentales», refiere el comunicado.
Compromiso con la formalización y el respeto ambiental
La Defensoría precisó que este proceso de diálogo debe basarse en pilares clave: la formalización laboral, el pago de impuestos, la erradicación de la trata de personas y toda forma de explotación y violencia en las comunidades mineras, y el cumplimiento de los estándares ambientales.
Finalmente, la Defensoría del Pueblo hizo una clara distinción entre la minería en proceso de formalización y la actividad minera ilegal. Esta última, según el comunicado, está asociada con una grave afectación a los pueblos indígenas, la biodiversidad, los ecosistemas y los sitios arqueológicos, lo que considera «un atentado a la humanidad».