- Mientras aterrizaban en Vietnam, Brigitte Macron le propinó un aparente «manotazo» a su esposo, el presidente Emmanuel Macron, generando una escena viral.
- El mandatario, en plena gira asiática, rápidamente calificó el gesto como una «broma».
El presidente francés, Emmanuel Macron, se encontró en el centro de la atención mediática tras un inesperado incidente con su esposa, Brigitte Macron, durante su llegada a Hanói, Vietnam, el pasado domingo. Las imágenes, captadas por la agencia AP al inicio de su gira diplomática por el Sudeste Asiático, muestran lo que muchos interpretaron como un manotazo de la primera dama en el rostro del mandatario, justo antes de que ambos descendieran del avión presidencial.
El video se propagó rápidamente en redes sociales, desatando una ola de especulaciones y comentarios. Numerosos usuarios interpretaron la escena como una posible discusión marital en público, observando cómo Brigitte Macron parece empujar el rostro de su esposo con ambas manos. La reacción de Macron, visiblemente sorprendido, y su posterior intento de recomponerse para saludar a la prensa mientras su esposa ignoraba su brazo extendido, avivaron aún más las conjeturas sobre el estado de su relación.
El Elíseo desmiente rumores y Macron aclara: «Estábamos bromeando»
A pesar de la reticencia inicial del Elíseo, que incluso puso en duda la autenticidad del material, la veracidad de las imágenes fue confirmada. El incidente reavivó el interés público en la relación de los Macron, especialmente dada la diferencia de edad de 24 años entre ellos, un tema que ya había generado titulares en el pasado. Incluso surgieron teorías conspirativas en redes sociales, con algunos usuarios acusando a Rusia de orquestar la difusión del video. La tensión del momento fue tan evidente que opacó el recibimiento oficial en Vietnam, con la pareja presidencial descendiendo del avión sin contacto físico, lo que alimentó aún más las interpretaciones.
Sin embargo, el propio Emmanuel Macron se encargó de poner fin a las especulaciones. Desde Hanói, el presidente francés ofreció una breve declaración a los periodistas, afirmando: «Con mi esposa estábamos bromeando, como lo hacemos bastante a menudo«. Con estas palabras, Macron buscó restarle importancia a lo ocurrido, añadiendo: «Todo el mundo debe calmarse», y asegurando que no se trató de una pelea ni de una escena de celos.
Posteriormente, la oficina presidencial francesa explicó que el incidente fue parte de una «complicidad» habitual entre la pareja antes de iniciar su agenda oficial. Un colaborador cercano al presidente describió el gesto como una «pequeña riña sin importancia». La controversia se incrementó cuando se notó que el video oficial difundido en la cuenta de Macron no incluía la escena del «manotazo», lo que generó críticas sobre la edición del material institucional.
