El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció este martes que enviará un proyecto de ley al Congreso para regular las redes sociales. Según Lula, es necesario «establecer estándares mínimos de comportamiento y procedimiento» para el funcionamiento de estas plataformas, ya que considera que las grandes corporaciones tecnológicas deberían ser responsables por el contenido que se difunde en ellas. En este sentido, citó una decisión del Supremo Tribunal Federal (STF) que establece la responsabilidad de las plataformas sobre el contenido grave.
El proyecto, que ha estado en desarrollo por dos meses, será enviado al Congreso para su regulación. Lula justificó la medida por la necesidad de proteger a los niños y adolescentes de ataques y delitos. En su opinión, los delitos cometidos en el entorno digital deben ser juzgados y castigados.
Propuestas sobre el medio ambiente y minería
En la misma entrevista, Lula adelantó que su gobierno propondrá la creación de un arancel para que los países ricos paguen por el cambio climático. Esta iniciativa se presentará durante la Conferencia del Clima (COP30) en Belém, en noviembre.
El mandatario también afirmó que buscará incluir la educación ambiental en el currículo escolar, ya que considera que educar a los niños puede influir en la conciencia de los adultos. Criticó la «irresponsabilidad humana» que, en su opinión, ha provocado fenómenos climáticos extremos en todo el mundo.
En materia de minería, Lula anunció la creación de un consejo para debatir la exploración minera, con el objetivo de que los minerales se procesen en Brasil. Criticó el modelo actual de vender el mineral de hierro sin valor agregado. También señaló que solo se conoce el 30% del territorio del país, y que se necesita explorar el 100% para dar un «salto cualitativo» como nación.
Finalmente, el presidente defendió la gestión ambiental de su gobierno, que ha logrado reducir la deforestación en la Amazonía en un 50%. Reafirmó su compromiso de alcanzar la deforestación cero para 2030, y destacó la importancia de proteger los ecosistemas para garantizar la calidad de vida de las comunidades que dependen de ellos, como los pescadores, caucheros y pueblos indígenas.