Una considerable multitud, estimada por el Vaticano en unos 150.000 fieles en la Plaza de San Pedro y áreas circundantes, asistió este domingo a la misa de inicio del pontificado del nuevo Papa León XIV. Esta cifra final se sitúa por debajo de las expectativas iniciales de las autoridades, que preveían una asistencia superior a las 200.000 personas, similar a la del reciente funeral del Papa Francisco.
El evento contó con la presencia de unas 150 delegaciones internacionales, incluyendo a dignatarios como los reyes de España, el presidente de Ucrania, Volodomir Zelenski, y el vicepresidente de EE.UU., JD Vance.
Ante la previsión de una gran afluencia, se desplegó un robusto operativo de seguridad en los alrededores del Vaticano, con vigilancia aérea mediante drones, estrictos controles de acceso y la participación de más de 5.000 agentes y 2.000 voluntarios de Protección Civil.
La celebración coincidió con el Año Santo proclamado por el Papa Francisco, que ya está atrayendo a millones de peregrinos a Roma durante este 2025. Además, este fin de semana se celebra el Jubileo de las cofradías, lo que llenó Roma de representantes de la devoción popular de diversos países, quienes participaron en una gran procesión de imágenes religiosas el sábado, incluyendo tallas emblemáticas como la Esperanza de Málaga, El Cachorro de Sevilla y el Nazareno de León. Este evento jubilar contribuyó significativamente a la presencia de fieles en la ciudad para la misa inaugural.