Israel bombardeó el cuartel general del Estado Mayor del Ejército sirio, ubicado en la plaza de los Omeyas, en pleno centro de Damasco. El ataque fue captado durante una transmisión en vivo de una cadena local, lo que permitió registrar el momento exacto en que estallaron las explosiones y se elevó una densa nube de humo.
Este es el segundo ataque israelí en esa misma zona en lo que va del día. Las autoridades sirias han confirmado que hay víctimas, aunque aún no se ha precisado si se trata de civiles o de personal militar.
La televisión estatal siria, Al Ijbariya, reportó en directo los bombardeos. Las cámaras enfocaban el estudio de una presentadora con la ciudad como fondo cuando, de pronto, se escucharon las detonaciones. Las imágenes mostraron columnas de humo negro que se elevaban desde la zona del impacto, en el corazón administrativo de Damasco.
El ataque tuvo como objetivo una de las sedes militares más simbólicas del régimen de Bashar al Asad: el cuartel del Estado Mayor. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, el edificio ha sufrido daños importantes.
Además del cuartel, otros objetivos fueron alcanzados en las inmediaciones del Parlamento y del Palacio Presidencial. Las detonaciones se sucedieron con pocos minutos de diferencia. La agencia oficial SANA confirmó la magnitud del ataque y señaló que todavía se evalúan los daños en cada zona.
Las fuerzas de seguridad internas también se habrían visto afectadas. Según declaraciones del ministro del Interior de Siria, algunos integrantes de la policía y del Ejército resultaron heridos, aunque no se ha dado una cifra oficial.
El ataque se produce en medio de una ola de violencia interna en el sur de Siria. En la provincia de Sueida, más de 240 personas han muerto en los últimos días durante enfrentamientos entre tropas del régimen y facciones armadas de la comunidad drusa. Estas acusan al gobierno sirio de cometer ejecuciones extrajudiciales y abusos durante operativos militares.
