El traslado de los reclusos forma parte de una estrategia integral del INPE para mitigar el hacinamiento crítico en los centros penitenciarios de la región Puno.
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) informó sobre el traslado de 145 internos sentenciados desde el Establecimiento Penitenciario de Juliaca hacia el penal de Puno.
La operación, realizada bajo estrictos protocolos de seguridad, fue dispuesta por la Dirección de la Oficina Regional Altiplano Puno. El operativo se ejecutó durante las primeras horas de hoy, 13 de noviembre, con los reclusos resguardados por agentes de seguridad durante todo el trayecto hasta su llegada al nuevo centro carcelario.
La decisión responde a la Resolución D000183-2025-INPE-ORAP y se justifica en la crítica sobrepoblación del penal de Juliaca. Según la Unidad de Estadística del INPE, a agosto del presente año, el recinto registraba un nivel de hacinamiento del 244%, albergando a 1,443 internos pese a tener una capacidad de albergue para solo 420. La sobrepoblación significa que el penal alberga a 1,023 internos por encima de su capacidad.
Esta situación de hacinamiento pone en riesgo la seguridad interna y externa del establecimiento, dificulta el desarrollo adecuado del tratamiento penitenciario orientado a la resocialización, y genera pésimas condiciones de vida para la población penal.
El penal de Puno fue seleccionado para la reubicación debido a que posee una mayor capacidad de albergue en comparación con otros centros carcelarios de la región altiplánica, como Challapalca (Tacna) y Lampa y Juliaca (Puno).
De esta manera, el INPE, a través de la Oficina Regional Altiplano Puno, reafirma su compromiso con la política de deshacinamiento en los establecimientos penitenciarios. Esta medida busca frenar la posible gestación de actos ilícitos y garantizar el control y la seguridad de los recintos en la región.
